Liz; " La promesa de Dios."

" ...cómo en sus intersticios una boca escarlata amanece: así conocen nuestro amor y el beso que reúne tu boca y la mía en una flor eterna..."

Pablo Neruda

La poderosa liz del verano, la promesa de Dios; Fragante a manzanas, profunda huella que entra por mi nariz despertando el deseo de mi boca. Oscuro encanto de mis besos, libando su rugoso encanto de carmín fraguado, de inentendible belleza y atractivo.

Se abre, como una flor llenando de fragancia el espacio que habito y atrapo; cuando la mañana cae, calentando el tibio día después de la lluvia. 

Tibio se esconde entre enjambres y temblorosa piel de exquisito sudor a noche. Suelta su temblor al roce de mis labios entregándose al tibio juego de moralidades y pudores.

Tiembla, despertando en granos su piel entumecida, despertando gemidos, mojado en la quebrada que la acoge con labios golosos, pristinos y mojados. Brillantes destellos de luz prenden su gozo infinito, ronronea cual gato cariñoso, corcovea como fiera indomable, suave entre dedos, sucumbiendo y salivando estertores de erotismo y sensualidad. Redondas, perfectas; temblando entre mis dedos como ligeros nectarines curiosos o niñas de tímidas palabras, de seductora caricia de suave textura.

Ellas son mi vicio escondido, negadas a las palabras, frondosas y de verticales risas, ellas son su vergüenza deseando ser disfrutadas... 

Sus bellas nalgas, mi felicidad; su bello brillo, mi deseo... el lado sucio del placer, el  escondido rincón negado para quienes sufren de delicada crianza, y que nunca harán disfrutar a una mujer.

Necesitaba una excusa para escribir y sin saber había un jueves esperando mi relato.

Gustab

                                             A los que necesiten de una buena excusa para escribir, Neo nos da esta semana una oportunidad.