Un grano de arena en la nada, Gustab.

La literatura erótica necesita que cuente con el prodigioso poder de exaltar los sentidos, haciendo aflorar los sentimientos y la excitación. ¿Dónde se encuentra su esencia, donde aquello que nos atrapa y a lo cual como lectores nos entregamos?. La fuerza de la misma no esta en mencionar escenas sexuales, sino en la creación de la magnífica tensión entre el sujeto y su objeto de deseo, que debe ser capaz de producir el escritor para que suene una melodía cautivadora que nos lleve a esa escena culmine, a ese glorioso paraíso para luego caer.

Frases cargadas de placer, descripciones, posiciones, aromas y metáforas que hacen de esta tensión erótica algo único y del sexo algo más que una mera unión transitoria de dos cuerpos.

«Sin erotismo no hay gran literatura", dice Mario Vargas Llosa

El erotismo es un enriquecimiento del acto sexual y de todo lo que lo rodea gracias a la cultura, gracias a la forma estética. Lo erótico consiste en dotar al acto sexual de un decorado, de una teatralidad para, sin escamotear el placer y el sexo, añadirle una dimensión artística.

Procuro sentir cada roce en mi piel, cual de una lengua se tratara, de un beso, de sabor, de un aroma, luego dejo correr mi mente y me entrego por completo a eso, escuchar sus gemidos me produce mas que placer, mas que extasis... es sin duda tocar los dedos de dios. El gusto de sentirme tan cerca de de esa experiencia, me hace vibrar de extasis, sucumbir al deseo carnal, entregandome en alma , cuerpo y espíritu en cada uno de mis relatos, siento el poder del "ser y estar", como un reloj de arena que nunca se detiene, porque siempre hay algo o alguien que le de la vuelta para seguir amando lo que doy y soy, un minúsculo espacio de tiempo atrapado en la inmensidad de dos cristales , "Un alma perdida, condenado a divagar entre el cielo y el infierno".

Estimado lector, lo invito a que se recluya en el silencio, siga la premisa de Oscar Wilde «la mejor manera de librarme de la tentación es caer en ella», colóquese al abrigo de una tenue luz y deleite su paladar literario con algunos escritos y poemas que despertaran sus pasiones e instintos. En palabras de Octavio Paz, «en todo encuentro erótico hay un personaje invisible y siempre activo: la imaginación»...

Gustab