Verdad o mentira, es realidad.
Quizás esta sea la respuesta a todo lo que nos aflige, mentir es y no es la verdad a no ser que haya consenso. En el sentir y pensar que no se miente , esta la respuesta definitiva a todas nuestras mentiras.
La sociedad compuesta por seres humanos, la cual está regida por el compromiso de mentir de acuerdo a un estilo vinculante para todos, de ser veraz, de utilizar las metáforas usuales, puede surgir en el hombre un anhelo de verdad, un anhelo de percepciones correctas, adecuadas a las cosas. Sin embargo, verdad, no es más que un conjunto de metáforas y antropomorfismos que atribuyen rasgos o formas humanas a realidades no humanas, que, después de un prologado uso, un pueblo considera firmes, canónicas y vinculantes:
" las verdades son ilusiones de las que se ha olvidado que lo son".
Todos quieren la verdad, porque no aceptan la mentira que los hiere, porqué quieren culpar al otro por el daño que sienten ellos, el dolor puede ser tan abstracto como la verdad.
Como si fuera un poema de verdad... Sus cuerpos desnudos me atrapan en una gran mentira, que de tanto estar, terminan siendo mi verdad. Ellas juegan con mi cuerpo, convirtiendo en llamas mi oscuridad, entonces puedo ver, sentir calor; el de sus manos sobre mi piel, el de su boca entre mis piernas, sobre mi sexo, con un deseo mentiroso, con un amor que, no es sino, necesidad de verdad no verdad.
Hace frío aquí, tiemblo, y las siento venir por los pasillos... mis sentimientos se erectan, me excita escucharlas cuando están cerca... se que el frío se irá y mi locura aparente se vera vestida de deseo. Me gusta lo tibio y suave de su piel, me gusta sentirlas desnudas... es el calor y el deseo de mantenerlo encendido, despierto, vivo.
A veces me quiero ir; es esa mi verdad?, es esa mi mentira?... sólo es lo que necesita escuchar mi mente, para decir lo que siento en el encierro, cuando mi libertad le pertenece a otras, ellas son mi verdad.
Gustab.
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Ciertamente, tan real es la mentira como la verdad, como una silla o un unicornio ; son productos humanos. La ficción es también real, muy real además, cuando nos mentemos en ella. Leyéndote me has recordado un librillo que leí hace ya algún tiempo de Nietzsche y que a mí me gustó porque en cierta manera venía a confirmar lo que para mí era una experiencia. El título en español debe de ser algo así como "Sobre la verdad y la mentira más allá de la moral". Creo entender que lo citas. ¿Que es entonces la verdad? esa era su pregunta y por aquí tengo apuntado que decía que es algo así como "un movimiento de metáforas, metonimias, antropomorfismos, brevemente, una suma de relaciones humanas que exageradas poética y retóricamente son transportadas y repetidas a lo largo del tiempo y se solidifican como si tuvieran realidad pero la verdad es eso, una ilusión que olvidamos que es una ilusión, metáforas desgastadas hasta el punto que hemos olvidado que son metáforas. El hombre miente inconscientemente y tienen la sensación de decir la verdad." Sin embargo, también es cierto que Sancho Panza o Quirón no sienten de verdad nada mientras que Cervantes o Dante seguramente que sí debieron de sentir para poder dales vida en sus obras. No sé si me explico. Buenas noches, Gustav y trata bien a tu autor, cuídalo.
ResponderEliminarA veces la realidad debe dejarse de lado en nombre de la FANTASÍA. Aunque la tengas presente y no la olvides, la vida da mucho tiempo a jugar y experimentar con lo real. El sexo es un buen campo de juego, puedes perderte en todo lo que crees que quieres hacer tal o cual cosa, todo el afecto o la pasión que pretendes derrochar en ese momento. Hay veces en que la realidad se impone con todo su peso y otras en las que lo performativo acaba transformándose en la realidad. Al fin y al cabo, la sociedad es un gran acto performativo. El más grande.
ResponderEliminarUn saludo de buenas noches, te sigo leyendo.
Gato Rojo 🐾
"con una mentira es posible que engañes a alguien, pero cualquier mentira te dice a ti mismo , una gran verdad...Eres débil."
ResponderEliminarGustab y la hoguera de las vanidades....
"Hay personas que son dueñas de las calderas, pero eso sólo, no les sirve de nada...
ResponderEliminara no ser que sepan controlar el vapor."
Eso es el autor, uno que sabe controlar el vapor.