Mentira. Tesis de la verdad. (Relato Juevero )

La mentira sólo hace daño a quién la recibe, a quién ignora la verdad y luego descubre que le mintieron. La mentira te hace pedazos convirtiéndote en despojo, en nada... pero sólo, si descubres la verdad.

Entonces la verdad se convierte en una gran mentira, al punto de justificarla y terminar aceptándola para poder seguir viviendo o ignorarla y morir. Quien luche contra ella, perecerá en ella, y esa es toda la verdad.

Yo miento, tu mientes , él miente, nosotros mentimos, vosotros mentís, ellos mienten. No existe el verbo verdad. La verdad parece desaparecer en la gramática sin rescatar al honesto. ¿Entonces porqué no mentir?.

Hoy el cuarto esta más frío que nunca, la desesperanza se apodera de todo, y el mentiroso sigue afuera mintiendo tras la pared. Ellas , las enfermeras, dicen que algún día saldré de aquí y las olvidaré. Sus cuerpos desnudos me atrapan en una gran mentira, que de tanto estar, terminan siendo mi verdad. Ellas juegan con mi cuerpo, convirtiendo en llamas mi oscuridad, entonces puedo ver, sentir calor; el de sus manos sobre mi piel, el de su boca entre mis piernas, sobre mi sexo, con un deseo mentiroso, con un amor que no es sino necesidad.(  " El amor dura, lo que dure dura." )

Entonces hablo de poder, que no es más que una mentira, que no es más. Los barrotes son más estrechos que en la realidad son. Las arañas tejen telas transparentes entre ellos, dibujando redes que terminan siendo trampas para el que ose acercarse a ellas. Y así también es el amor. No digo que sea una mentira, pero tampoco termina convirtiéndose en verdad. Es todo tan frágil, tan poco importante, que terminas entregándote a él.

El orgasmo es tan real tras una eyaculación, que ellas , las enfermeras, creen que me hacen feliz, y a

veces lo soy. Pero en ellas, sólo veo estrellas, tan cerca como están las reales estrellas, que nunca puedo llegar a ver en su totalidad, porque están tan lejos como ellas. Como dije arriba, es poder que finalmente no lo es.

Cuando llega la mentira, llega la negación y forma un nuevo verbo que no es un verbo. Yo no miento, tu no mientes, él no miente, nosotros no mentimos , vosotros no mentís, ellos... no mienten.

...  "el que miente con arte es el que sabe la verdad, y el que miente sin la verdad, no tiene arte para mentir"...

Entonces todo es mentira y nada es verdad. Y aquí me tienen, entre estas cuatro paredes blancas y yo, sin entender porqué. Ellas encima de mi, y yo abajo de ellas. Una pastilla blanca más y todo esto se olvidará. Bien dice el tango...

"¡Mentira, todo es mentira!
De las caricias
de las promesas y juramentos,
nada quedó.
¡Mentira, todo es mentira!
Las alegrías... las ilusiones...
mi fe en el mundo,
todo murió.
Yo tuve sueños, tuve esperanzas
y, en los jardines de la ilusión,
busqué en los ojos de un alma hermana
los sentimientos de un corazón."

Gustab. filosofías de un loco.