La muñeca rota. (relato Juevero).

23 de Julio de 2011

Era un día caluroso, la humedad lo envolvía todo. Su cuerpo sudaba más de lo acostumbrado. Su enagua de seda, dibujaba su cuerpo con pinceladas oscuras, llenas de soledad. El sudor de su cuerpo, ceñía su figura delgada, despertando toda mi morbosidad, aquella que encendía las ideas en mi cabeza, como una danza de oscuros demonios. Era una muñeca rota, con el moño colmena que le caracterizaba, cada vez más alto.La veía moverse inquieta y con un vaso de destilado entre sus dedos, murmuraba:
-“Yo sólo quiero cuidar de ti”. "No quiero ser malagradecida; sé que tengo talento, pero no llegué al mundo a cantar. Llegué para ser esposa y madre y cuidar de mi familia. Amo lo que hago, pero mi profesión no es en donde empiezan y terminan las cosas”.- 
Nadie había a su alrededor, sólo su espejo sin nada que responder y yo, como una hoja en blanco,
esperando a que escribiera sus notas para una nueva canción. Sólo escuchaba sus murmullos y el sonido de la lavadora en la otra habitación. 
El dialogo con el espejo continuaba, y ella volvía a rellenar el vaso de licor. Su soledad era tan grande , como la de la imagen del espejo, que sin respuestas, la intentaba salvar. 
Los demonios en su cabeza, sólo hacían crecer su angustia tras cada vaso, tras cada palabra, sin una historia que armar. Sus pensamientos se cruzaban, sin dejar entender que era y no era verdad.

-“Todo me recordaba a él. Veía manchas de sangre en la pared de sus manos y en realidad era de mis propios puños”.- 
La adicción al amor de Amy y su dependencia emocional hacia él, que rozaba el masoquismo supliendo la figura ausente del padre, le llevaban a la recta final hacia su autodestrucción. Tenía una adicción, pero no sólo a las drogas, sino a su amor por él. Todo el mundo piensa que fue el alcohol lo que la mató, pero no fue así, fue el amor lo que puso su vida en la cuerda floja, como tantas historias que no se alcanzan a escribir. Una adicta al amor, igual que yo.
Cuando estábamos juntos, ella y yo, sólo frente a mi rostro en blanco, siempre me decía porqué escribía así.
Desnuda y ebria , dejaba caer sus senos sobre la textura sin vida de lo que estaba hecho yo, acariciando mi piel con su piel, despertando mi excitación en cada movimiento cuando escribía. Me hablaba con ternura, sin saber lo que yo sentía.

-“Me sentía rara, entonces yo lo expresaba cantando y tocando. Escribía y tocaba porque estaba mal de la cabeza”.- pero ese día, sería diferente, tristemente infernal.
Yo quedaría en blanco, siendo el testigo de su triste final, su última composición sin interpretar. Sólo era su libreta de notas, a veces sólo un papel, sin vida y sin nada que contar. Imposibilitado de hacer algo. Un objeto inanimado sólo para guardar sus tristezas.
Había perdido la cuenta de las copas que había bebido. La vi levantarse a trastabillones y caer en el intento de alcanzar su cama, y beberse hasta la última copa que de la botella podría salir. Mientras sus brazos empezaban a caer y colgar, mientras sus ojos se cerraban, no se cansaba de repetir...

-“Ahora puedo hacer lo que quiera, estar tirada en casa todo el día con mi novio”.- Pero no era así, él estaba lejos de ella, y no lo podía aceptar.
Si yo lo hubiese podido impedir, si hubiese tenido vida para detenerla, si hubiese podido dejar caer el bolígrafo en sus manos antes de esa última copa... si hubiese estado vivo, pero no, sólo soy un triste papel adicto al amor.

Eran las 4 de la tarde del 23 de julio de 2011. Amy Winehouse había muerto por una intoxicación etílica. Al costado de la cama había tres botellas de vodka vacías. Los análisis toxicológicos demostraron que no había rastros de drogas en su sangre.

Como si lo hubiese sabido alguna vez, escribió sobre mi cuerpo esta triste predicción...

" No dejó tiempo para arrepentirse,
Mantuvo su pene mojado.
Con su misma vieja apuesta segura.
Yo y mi cabeza en alto
Y mis lágrimas secas.
Sí, sin mi chico.
Solo nos dijimos adiós con palabras,
he muerto cien veces,
tú vuelves con ella,
y yo vuelvo...
y yo vuelvo a nosotros.."

Gustab.

Comentarios

  1. Hola, Gustab.
    Primero de todo agradecerte la participación en mi convocatoria y segundo, felicitarte por el magnífico texto. ¿Conservador? ¿Lo dices por esos deseos más sencillos que plasmas en tu texto? Me parecen perfecto. Son elecciones solo que no siempre las tomamos por el camino que debemos.
    Bellas frases, bellos párrafos y una historia que podría haber acabado de otra manera. Nadie lo evitó.
    Un beso enorme.

    ResponderEliminar
  2. Gustab has creado un relato imaginario, - que como todo lo que se puede imaginar- , que aunque quién sabe, quizás sucedió así.
    Mi enhorabuena por mi parte.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Plasmaste una artista talentosa, que se fue demasiado prontoo.
    Y la emoción de aquel objeto, un papel, imposibilitado, por su naturaleza, de intervenir.
    Destinado a llevar sus últimas palabras.
    Bien contado. Saludos.

    ResponderEliminar
  4. Amy Winehouse. Una de mis preferidas. Dolorosa muerte la suya. Una más del club de los 27. Jóvenes talentosos muertos antes de tiempo. Merecido homenaje que le haces al evocarla. Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Hola Gustab.
    Poco podías hacer en el papel de papel. Si hubieras sido botella de vodka,podías haber atascado el mecanismo de la bolita y no dejar salir el líquido. Quizás con dos botellas no hubiera muerto, y habrías conseguido alargarme la vida hasta el día siguiente. Así que no te martirices. Bien contado y muy buen apuntados los matices eróticos. Sin duda el papel era un amor no correspondido.
    Saludos
    Si se me permite un apunte, sin ánimo de crítica, gris claro sobre rosa claro, a los que no gozamos de una maravillosa vista, se nos hace difícil de leer. Quizás subir. Un poco el tono del gris ... perdona si me meto donde no me llaman

    ResponderEliminar
  6. Muy acertada entrada. Ha sido una perdida enorme. Qué voz, qué demonios y oscuridades en su alma

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  7. Una maravilla de relato, has hecho fácil lo difícil, darle vida a una hoja o un cuaderno en blanco,testigo mudo, donde tan gran voz, podía escribir y descargar sus penas. Y es que el amor es tan necesario como la vida misma.
    Genial!
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  8. Mr Gabilante, me costo, pero esta logrado, no soy muy experto en esto de las configuraciones, paso mucho rato y termino confundiéndole todo.... pero ya, esta simple, y para leer.

    ResponderEliminar
  9. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  10. Hermoso honenaje a una joven talentosa que hubiea necesitado una terapia psicológia comprometida para tratar esa dependencia emocional y vacío interno. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  11. Felicitaciones por tu maravillosa entrada.
    Me da risa la psicologa argentina lo que comenta
    beso

    ResponderEliminar
  12. Muchas gracias por la atención. Mucho mejor así, por lo menos Ami me resulta más fácil, y supongo que alguno más habrá.

    Gracias, saludo y abrazo

    ResponderEliminar
  13. Preciosa recreación de las últimos momentos de esta gran cantante. Tus palabras suenan a su música: desgarradora, rota, profunda pero siempre bella. Creo que es un relato muy hermoso.
    Seguiremos soñando con ella. Una abrazo,Gustab

    ResponderEliminar
  14. Dicen que una psicóloga no arregla tu vida... sólo te ayuda a aceptarla.
    La misma pena, la misma soledad... hasta que un día te lleva la vida y sólo rescatas un instante, el último que te hará pensar.
    Luego se cierran los ojos, y al parecer nunca más se vuelven abrir... depende de tí y de mí, rescatarla.

    Gustab.

    ResponderEliminar
  15. Interesante tu comentario. No creo en la psicilogía para mi,mi blog es mi sicólogo, ya que he tenido como estudiantes a psicólogos que no pueden salir de ellos mismos enredados y confundidos en un mundo triste. Dos de ellos se suicidaron.
    Gracias por compartir tu mente y largar lo que sientes así sin cara y sin nombre en este momento de tu vida ausente Aunque tienes miedos. El no poner el rostro te hace ocultarte y quizás si lo pusieras, tu mente no escribiría lo que a oscuras escribes
    Un abrazo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Desde la oscuridad...

Entradas populares